Abrir las puertas al aprendizaje con herramientas y dispositivos accesibles.
A menudo no es suficiente con proporcionar a un estudiante una herramienta, sino que se necesita otorgar apoyos para hacer un uso efectivo de la misma.
Muchos estudiantes necesitan ayuda para navegar en su entorno (tanto en lo que se refiere al entorno físico como al currículum) y por ello hay que garantizar que todos tengan la oportunidad de usar herramientas que les ayuden a alcanzar la meta de su plena participación en el aula.
Muchos estudiantes con discapacidad tienen que usar con regularidad tecnologías de apoyo para navegar, interactuar o redactar. Por ello, es fundamental asegurarse de que las tecnologías y el currículum no generen barreras para la utilización de esos apoyos que puedan pasar inadvertidas.
Una consideración importante en el diseño es, por ejemplo, asegurar que haya comandos de teclado para cualquier acción con el ratón, de manera que los estudiantes puedan utilizar tecnologías de apoyo comunes cuyo funcionamiento depende de esos comandos.
No obstante, también es importante asegurarse que al hacer una lección en formato accesible no se elimina, de manera inadvertida, el desafío que se requiere para el aprendizaje.